Las prácticas del lenguaje se adquieren en el ejercicio mismo ya que los niños se incorporan progresivamente a los intercambios orales que se producen en su ámbito cercano y se apropian de recursos lingüísticos que les permiten hacerse entender. El aula y el preescolar todo deben construir un espacio confiable que los invite a ejercer cada vez mas eficiente las practicas vinculadas con la oralidad, la lectura y la escritura. Esto se logra cuando en el aula y en otros espacios de preescolar se crean las condiciones didácticas que permitan a los niños ejercer las practicas de los hablantes, los lectores y los escritores y apropiarse de ellas.
El uso y la reflexión sobre la aplicación de estas prácticas sociales constituyen el objeto de enseñanza. Deben diseñarse, entonces, situaciones en las que los niños encuentren oportunidades frecuentes de hablar, escuchar, leer y escribir teniendo en cuenta el uso del lenguaje.


No hay comentarios:
Publicar un comentario